El presidente Andrés Manuel López Obrador manifestó que el caso de Rosario Robles está en manos de la Fiscalía General de la República (FGR). Esto, en torno a la investigación que la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) habría iniciado sobre la supuesta venta de terrenos federales y reservas territoriales por parte de Robles, exsecretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).
“Lo tiene la Fiscalía y la instrucción que tiene FGR Santiago Nieto, en este caso y en todos es que se envíen todas las pruebas a la Fiscalía… Es muy importante aunque ya se ha dicho es que los servidores públicos tienen la instrucción de no archivar ningún expediente, de no meter en los cajones ningún expediente porque serían encubridores”.
Las indagatorias también contemplaría la supuesta implicación de exfuncionarios del Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales (Indaabin).
Entre las supuestas propiedades involucradas se encontrarían la presunta venta de un predio de 262.5 hectáreas, ubicado en la carretera Cancún-Tulum, en Quintana Roo, que habría sido valuado por un perito, de la entonces PGR, en mil 240 millones de pesos, no obstante la Sedatu lo habría vendido en 61.4 millones de pesos.