El niño explicó que había robado los útiles escolares porque su papá no tenía dinero para comprar los materiales con los que podría hacer sus tareas.
Un menor de trece años fue sorprendido mientras robaba útiles escolares de una tienda de autoservicios ubicada en Rincón de Romos, Aguascalientes.
De acuerdo con los reportes de lo sucedido, el adolescente entró a una Bodega Aurrera e intentó llevarse sin pagar pinturas, plumones y algunas libretas que necesitaba para hacer sus tareas escolares.
“Se recibió el reporte por teléfono la frecuencia de radio. Se le da la instrucción a uno de los elementos que se trasladara a Bodega Aurrera. Tenemos aquí una mini bodega donde habían reportado que una vigilante tenía retenido a un menor, porque había sustraído unas pinturas, unos plumones, me parece que unos cuadernos”, detalló Sergio Olvera, director de Seguridad Pública.
El niño de trece años fue encontrado en flagrancia, portando su uniforme escolar y asustado por la acción que había cometido.
“Al cuestionarle por qué había sustraído los plumones él nos mencionaba que tenía algunas tareas qué hacer y no contaba con el material suficiente, por lo que se le hizo fácil al jovencito. Tiene 13 años y, al venir con su uniforme, en este caso se nos hizo que era un niño bien, no se veía descuidado y se le veía la preocupación de que requería de ese material”, explicó el funcionario.
El niño explicó que había robado los útiles escolares porque su papá no tenía dinero para comprar los materiales con los que podría hacer sus tareas.
“A él si le gusta estudiar, no quiere pasar por lo mismo que está pasando uno, de no tener nada. Él se quiere superar y tener sus cosas. Yo le cuento de lo mío de muchacho que yo pasé, que yo no pude estudiar”, explicó Matías, papá del menor que robó los útiles.
El padre del niño le había prometido comprar los útiles en cuanto le pagaran; sin embargo, el adolescente se desesperó y acudió a la famosa tienda de autoservicios, donde se le hizo fácil tomar los útiles escolares que ocuparía para una tarea.
“Yo ya le había dicho espérame, hijo, de aquí al fin de semana y vamos a Aurrerá y compramos lo que te hace falta”, señaló el padre.
Como parte de una acción altruista, los policías decidieron pagar los 90 pesos de los útiles escolares para que el niño pudiera llevárselos y para que no lo canalizaron a la Procuraduría de la Defensa del Menor.
Por su parte, el menor ofreció una disculpa al encargado de seguridad de la tienda de autoservicios por lo que había hecho.
Con información de Excélsior