Al menos 60 sacerdotes han muerto en Italia a causa del coronavirus; de acuerdo con medios locales, muchos de ellos habrían adquirido en virus mientras ejercían su oficio, ya sea en las misas cotidianas o acompañando a enfermos en hospitales. Uno de estos clérigos fue Giuseppe Berardelli, de 72 años.
Berardelli, era el sacerdote principal de la ciudad de Casnigo, en Bérgamo, la localidad más afectada de Italia por Covid-19.
Giuseppe Berardelli fue diagnosticado con coronavirus y los feligreses, preocupados por su salud, reunieron dinero para comprarle un respirador que le diera mayores posibilidades de sobrevivir, pues como sabemos, los adultos mayores son, hasta el momento, la población más vulnerable. Sin embargo, él lo cedió a un paciente más joven.
El sitio de noticias web Arabera relató que una vez que el respirador estuvo disponible, el septuagenario tomó la decisión de rechazarlo para que un hombre enfermo y más joven que él pudiera utilizarlo.
A pesar de haber luchado para salir de la enfermedad, el cura murió el pasado 15 de marzo, pero, debido a la situación por la que atraviesa su localidad, vecinos, feligreses y amigos no pudieron hacerle un funeral tradicional, sin embargo, lo honraron a su manera.
Cuando el ataúd de Berardelli, salió hacia el cementerio, las personas aplaudieron desde ventanas, balcones y puertas como muestra de amor, agradecimiento y respeto.
Sobre la muerte del párroco, Giuseppe Imberti, alcalde de Casnigo, dijo que él fue un hombre sencillo y querido por la población en general, no sólo por los religiosos. “Era una persona sencilla y directa, con una gran amabilidad y ayuda hacia todos, creyentes y no creyentes”, dijo.
“Lo recuerdo en su vieja moto Guzzi, le encantaba su moto, y cuando lo veían pasar siempre estaba alegre y lleno de entusiasmo”
Denisse Dresser vuelve atacar a AMLO, dice que es un peligro para la salud; ¿la oposición esta desesperada? https://t.co/emqAnHlZCg vía @NoticiaMex
— NoticiaMx (@NoticiaMex) March 24, 2020