Por Emmanuel Ameth
El expresidente Enrique Peña Nieto inició su gestión con una deuda de 5.6 billones de pesos, misma que dejó en 10.4 billones; el 42% de lo que solicitó, con sus respectivos intereses, pudo haber sido ahorrado de haber combatido la evasión fiscal.
Para 2019 se pagarán alrededor de 750 mil millones de pesos por capital e intereses de la deuda, suma que pudo ser 145 mil millones menor (equivalente a 2 remodelaciones como las que se harán en el aeropuerto de Santa Lucía) de haber evitado evasiones y condonaciones fiscales, principalmente a los grandes empresarios.
La evasión fiscal en México alcanzó los 2 billones de pesos de 2014 a 2018, lo que significa aproximadamente la décima parte del presupuesto de egresos de cada año, dijo Carlos Romero Aranda, procurador Fiscal.
Romero Aranda indicó que, en la actualidad, el marco jurídico impide que las autoridades puedan detectar el beneficiario final de una operación, de acuerdo con El Economista.
’De 2014 al 2018, el monto de evasión fiscal por facturas está calculado en 2 billones de pesos… esto quiere decir que son 500,000 millones de pesos al año, que es la décima parte del presupuesto al año lo que se está defraudando en estos esquemas’ dijo el especialista.
Según Romero Aranda, ha habido casos donde personas de ’escasos recursos o de origen muy humilde’, a cambio de una pequeña cantidad, prestan un servicio para defraudar al fisco, pues firman como accionistas de empresas que defraudan o como administradores de las mismas.
‘Personas de avanzada edad llegan a inscribirse al Registro Federal de Contribuyentes (RFC), a sacar su Firma Electrónica, que no tienen propiamente ingresos más allá de uno o dos salarios mínimos y al mes siguiente están sacando facturas por 100 millones de pesos, entonces no cuadra una cosa con otra’, comentó.
Y no es que las empresas tengan una carga fiscal insostenible. Siendo la onceava economía del mundo, México es el país que menos tributaciones recoge dentro de la OCDE.´
Con información de FORBES.