El pasado domingo 17 de noviembre, un niño de 4 años fue asesinado por sus padres, debido a que el pequeño lloraba dentro de un inmueble ubicado en el fraccionamiento El Rehilete, Guanajuato.
El menor lloraba y, por ello, los detenidos lo golpearon en repetidas ocasiones hasta notar que el llanto había parado, pero fue porque le habían causado la muerte por traumatismo craneoencefálico y de tórax.
Lo anterior fue confirmado por los servicios de emergencia, quienes arribaron al lugar después de que recibieron un reporte de los hechos.
Asimismo, elementos de la policía llegaron y detuvieron a los presuntos asesinos, quienes fueron identificados como la madre del menor y su pareja.
Ambos fueron puestos a disposición de la Unidad Investigadora, en el domicilio los servicios periciales aseguraron la escena del crimen y diversos indicios sometidos a pruebas científicas y periciales.
Por su parte, el Juez de Control determinó vincular a proceso penal a Nidia “N” por el delito de homicidio en razón de parentesco, mientras que Omar “N” enfrenta cargos por homicidio calificado, por el que permanecerán en el Cereso local como medida cautelar durante la investigación complementario.