Una mujer murió después de esperar seis horas la llegada de una ambulancia en el pavimento congelado en Cwmaman, cerca de Aberdare, en Gales, Reino Unido. Donna Gilby no pudo moverse después de tropezar mientras salía de su automóvil en Cwmaman debido a que se rompió un pie.
La mujer, de 47 años, quedó en agonía en el suelo mientras sus familiares llamaban insistentemente al número de emergencias y los operadores respondían que estaban atendiendo un gran número de llamadas.
Los vecinos y familiares tenían miedo de trasladar a la mujer porque sufría de problemas de espalda. Decidieron cubrirla con abrigos y mantas en un esfuerzo por mantenerla caliente.
Pero después de ser transportada finalmente al Hospital Prince Charles en Merthyr Tydfil, seis horas después, Donna Gilby murió de un paro cardíaco al día siguiente.
Autoridades decidirán si abren una investigación
El forense ahora decidirá si realizar una investigación. El padre de Donna, Gareth Gilby, dijo: “Simplemente no está bien que ella estuviera esperando todas esas horas”.
El hombre, de 74 años, compartió una fotografía de su hija derrumbada en la calle porque la familia pensó que era importante que las personas supieran por lo que ella había pasado.
Llamamos al servicio de ambulancia y les dijimos que Donna estaba entrando y saliendo de la conciencia, eso debió haber sido entre las 8 y las 8:30 de la mañana”, explicó el padre de la mujer.
Añadió que el administrador de las llamadas les dijo que tenían un gran número de emergencias, pero que llegarían a atenderla lo más pronto posible.
Una ambulancia finalmente llegó poco antes de las 2 p.m., dijo.
Pero Donna Gilby, que había sufrido un latido cardíaco irregular, murió temprano el miércoles por la mañana.
Era tan buena como el oro y siempre ponía a los demás antes que ella”, dijo su padre. “Ella haría cualquier cosa por cualquiera. Como resultado, ella puso sus propios problemas en segundo lugar”, añadió.
No hay indicios de que la muerte de la señora Gilby haya sido causada por la espera de ayuda, pero, en un comunicado, el Servicio de Ambulancia de Gales se disculpó por el retraso y prometió investigar la lenta respuesta.