El general Qasem Soleimani, acompañado de otro líder proiraní, fallecieron después de un bombardeo cerca del aeropuerto de Bagdad organizado por el ejército de Estados Unidos.
Soleimani era considerado el brazo derecho del ayatola Ali Jamenei e incluso le reportaba directamente. Desde 1998, comandaba el grupo de élite Quds, perteneciente a la Guardia Revolucionaria de Irán
A dicho general se le responsabiliza de haber planeado una estrategia para que Bashar al Asad, presidente de Siria, pudiera vencer a las fuerzas rebeldes de su país.
En 2001, Soleimani fue uno de los principales mandos militares que trabajó con Estados Unidos para vencer al régimen talibán en Afganistán e incluso ayudaron a mejorar el escenario de seguridad en Irak en 2007.
El grupo Quds se encargó de entrenar y armar a los chiitas, quienes han combatido contra el Estado Islámico. Algunos de estos grupos ahora estabilizan la seguridad en Irak.
Estados Unidos alegó que bombardeó al general para “disuadir futuros planes de ataque de Irán” y con el fin de proteger a sus ciudadanos y sus intereses “dondequiera que estén”, de acuerdo con un comunicado del Pentágono.