Los desinfectantes más comunes para la limpieza pueden contener todo tipo de productos químicos desagradables, algunos de los cuales en realidad solo deben usarse en entornos controlados como hospitales.
En el top de los productos más cancerígenos, destaca Lysol. Su etiqueta advierte los riesgos para los seres humanos y animales domésticos. Pero omite mencionar si contiene un químico que cause cáncer.
Provoca moderada irritación ocular. No rociar en los ojos, la piel o la ropa. Lavarse abundantemente con agua y jabón después de manipular el producto y antes de comer, beber, mascar chicle o fumar.
La Coalición para la Prevención del Cáncer (CPC) y Ralph Nader (EU) han publicado una lista de 10 productos utilizados en la mayoría de los hogares. Entre ellos, se incluye Lysol.
Los aerosoles y toallitas desinfectantes contienen ingredientes como:
- Etanol desnaturalizado: si se inhala o se ingiere, causa depresión del sistema nervioso central
- Cloruro de alquil dietil bencil amonio – pesticida registrado en la EPA
- Ortofenilfenol (OPP): un carcinógeno conocido
Otra de las razones para no usarlo excesivamente. Una de las razones de esto es que cuando se usan en el hogar de manera inapropiada, en realidad pueden ayudar a las bacterias a volverse resistentes a los químicos, creando superbacterias.
Los desinfectantes pueden contener compuestos de amonio cuaternario como cloruro de benzalconio, aceite de pino, alcohol, etanol, fenol o derivados de fenol, cresol, TCE, PDCB, butilcelosolve, detergentes y formaldehído.
“Ahí está el vatillo con el coronavirus. Ahí está en la venta el cabrón, ya se quiere suicidar”, se escucha una voz. Los que ciudadanos a su alredor le gritan: “Tírate wey, tírate…”
— NoticiaMx (@NoticiaMex) February 28, 2020
https://t.co/vWK6Jf305g vía @NoticiaMex #COVID19mx
Los ingredientes desinfectantes están diseñados para matar gérmenes, por lo que a menudo son de naturaleza tóxica debido a este aspecto de “matar”. Un desinfectante puede no parecer nocivo para los humanos si se diluye o la exposición es limitada.
Pero, históricamente hablando, ha habido varios incidentes en los que se pensó que un desinfectante químico estaba bien para su uso y luego se descubrió su toxicidad.
Las soluciones concentradas de compuestos de amonio cuaternario pueden destruir las membranas mucosas. Es sorprendente la cantidad de químicos que podemos absorber simplemente respirando los humos en un área cerrada.
La ingestión puede causar quemaduras en la garganta.
Los fenoles y los cresoles son especialmente tóxicos. Aunque muchas compañías han eliminado estos productos químicos en desinfectantes, aún puede encontrarlos en algunas formulaciones más antiguas.
Todos los fenoles son corrosivos y dañinos para la piel y los ojos, y la exposición prolongada puede provocar daño hepático y renal.
Bendito calor: El coronavirus no resiste temperaturas altas https://t.co/2xVANKjrXF vía @NoticiaMex
— NoticiaMx (@NoticiaMex) February 28, 2020